Su negro culo estaba en venta
Llevaba un rato sentado esperando a que pasaran unos amigos, pero iban con bastante retraso. Decidió por tanto darse una vuelta por el barrio, cuando de repente se encontró sentado en el suelo a un chico negro bastante musculoso. Era algo que ambos tenían en común, ya que también era un hombre bastante fornido. Sin embargo lo confundió con un chapero y le propuso tener sexo, pero el tío negro se enfadó bastante con él. Decía que no estaba en venta, pero en cuanto le hizo una oferta su actitud cambió completamente y le pidió que le acompañase a un lugar que él conocía. Allí empezó a chuparle la polla, desde luego era una buena forma de matar el tiempo.
Se había puesto muy caliente, y fue entonces cuando le dijo que tenía que penetrarlo. El negro estaba ya preparado para eso, solo tuvo que sentarse sobre su verga y de esta forma sintió como entraba dentro de él. Luego lo puso a cuatro patas y siguió follándoselo hasta que al final se corrió en su espalda. Para haberse hecho tanto el duro al principio disfrutó bastante el cabrón.