Somos familia, ¿te da vergüenza o que?
Hablaba con su chico por teléfono, todo iba bien hasta que se giró y vio a su hermanastro totalmente desnudo. Colgó el teléfono y le preguntó que hacía, le respondió que como eran familia no debía tener vergüenza. Sin embargo el cabrón estaba bien duro y no podía apartar la mirada de su verga, por supuesto que lo deseaba. No quería ni mirarlo, se tapaba los ojos, pero finalmente sucumbió. Empezó a comerle el rabo y fueron a la habitación, allí penetró a su hermanastro y se lo cogió.
Tras follárselo un rato cambiaron, ahora era él quien recibía su rabo. No sabía que tenía ese placer en su propia casa.