Le gustan los hombres fuertes
Estaban los cuatro amigos en la casa de uno de ellos, pero finalmente a media noche uno fue a vistar a otro. Era un tío fuerte, cachas, de esos que se la ponen dura a cualquiera. Lo quería para él. Se metió en su cama con la excusa de ver la tele, pero no tardó en buscar su verga para comérsela, al fin y al cabo era lo que los dos querían. No tardaron en desnudarse y pudo ver mejor su fibroso cuerpo, pero él quería sentirlo bien dentro. Se lo folló en su cama y acabó dentro de él mientras estaba bien abierto de piernas, fue una noche de sexo que ninguno olvidaría jamás.