Su amigo hetero le dijo 15 veces que no quería
Le dijo una vez tras otra que no quería, lo apartaba, pero el chico estaba muy insistente. Acababa de salir de la ducha con tan solo una toalla y su paquete muy duro, y que su mejor amigo estuviera en su casa esperándolo le dio ideas de poder tener algo con él. Ya sabía que no era gay y que le costaría llevárselo al lado oscuro, pero con un poco de perseverancia (sin abusar) se puede conseguir cualquier cosa. El tema es que ambos ya lo habían hablado alguna que otra vez y su amigo siempre decía que algún día lo probaría, pero llegado el momento no se atrevía a dar el paso.
Pero no solo dio ese paso, sino que además se puso duro tras la mamada de su amigo. Con su polla dura como una piedra ya era otra persona, solo buscaba agujeros donde meterla, y el culo de su mejor amigo parecía un buen lugar.