¿Acaso no quieres jugar?
Claro que quería jugar, de hecho lo estaba deseando. Los dos estaban en el sofá y se le acercó bromeando, hasta que llenó su cuerpo de nata como si de leche se tratara. El otro chico al principio se hacía el difícil, como que no quería nada. Pero cuando le preguntó si quería jugar o no entonces sucumbió a la tentación. Empezó a comerle la verga y los dos se desnudaron para follar, al fin y al cabo ambos lo deseaban. Fue una gran follada que sin lugar a dudas los dos chicos estaban más que dispuestos a repetir.