¿A que te gusta hijo?
La respuesta era obvia, claro que le gustaba a ese joven vicioso que se lo cogiera su padrastro. La diferencia de edad se la ponía dura, pero el hecho de que fuera el hombre de su madre todavía más. Empezó a tocarle y poco después fueron al sofá, allí se besaron ignorando por completo su parentesco familiar. El jovencito no tardó en comerle la verga a su padrastro, se la puso bien dura. Luego el hombre se la comió a él también. Finalmente se desnudaron y el muchacho se puso encima para que lo penetrara hasta el fondo, cosa que por supuesto hizo. Acabó el joven tumbado en el sofá mientras el maduro se lo follaba sin parar.