Tengo al mejor jefe del mundo
Así da gusto trabajar desde luego. Mi jefe no solo es atento y paga bien, sino que además está buenísimo y siempre está dispuesto. Hasta en horas de trabajo como puedes ver en este vídeo solemos hacer cosas que para otros sería impensables. Pero él a mi me pone caliente y yo se que también pongo cachondo a mi jefe. Ese día él vino hacia mi, pero no precisamente para hablar. Tenía la polla dura y yo lo sabía, por lo que al poco de venir a mi despacho comenzamos a besarnos apasionadamente.
Los besos durarían poco tiempo, al fin y al cabo estábamos en horas de trabajo y no podíamos perder el tiempo. Por eso mismo y tras bajarme los pantalones mi jefe me folló el culo hasta que acabó corriéndose en mis nalgas.