Probando la polla de su joven empleado
El ejecutivo solía viajar con frecuencia, pero en esta ocasión le pidió a uno de sus empleados que le acompañase. Para el muchacho era una buena oportunidad para aprender y relacionarse, pero lo que no sabía es que iba a relacionarse demasiado bien con su jefe. Una vez en el hotel el hombre le dijo que iban a compartir habitación, por lo que no tardó en sospechar lo que quería… y por supuesto se lo iba a dar. Una vez allí comenzaron a besarse apasionadamente a la vez que se desnudaban. Poco después era el jefe el que se comía la polla de su empleado con demasiada pasión, tal vez por las ganas que tenía de probarla.
Poco después era su fornido empleado el que lamía su ano con deseo, hasta que finalmente su jefe se la metió por el culo. Follaron mirándose a los ojos hasta que finalmente el maduro se corrió en su ano. Después lo lamió todo…