Mi padre me visita algunas noches
Muchos jovencitos reciben por la noche la visita de su padre. Pero no con la intención de tener sexo con él como hace este maduro. En realidad es como si su hijo lo estuviera esperando, ya que cuando le ve abrir la puerta no puede evitar una mueca de alegría en su cara. Y es que el chico sabe que su padre está muy bueno, es un tío deportista a pesar de sus años, con buen cuerpo y que se cuida bien. Se puede hacer una idea de lo que debe ser follar con él, y no pocas noches ha terminado pajeándose pensando en ello. Pero esa noche la historia iba a ser diferente y por fin iba a tener a su padre dentro de él.