Nos pueden pillar, pero no pares
Claro que los podían pillar, estaban en clase. Se habían quedado ellos dos acabando las tareas del día, estaban solos y el de atrás intentaba copiar. Pero no le dejaba, que se lo currase él. Lo que sucedió entonces fue que se levantó e hizo que el chico se levantara de allí, desde luego era todo un cabrón. Lo puso de rodillas y sacó la verga, le dijo que se la comiera y él obedeció. Le tenía un poco de miedo, como todos, pero al mismo tiempo también le gustaba. Luego lo tumbó sobre una de las mesas de clase y se la metió. Le dijo que podían pillarlos, pero eso ya lo sabía, solo que le daba igual. Acabaron totalmente desnudos y se lo folló sobre su mesa de clase, fue realmente excitante.