Joven espiado en un bar gay
El dueño de este bar se ha cansado de tener todos los días a tíos ligando en su local y él no comerse nada, por lo que pensó en poner una cámara oculta en los baños para al menos alegrarse la vista. Pues desde que la puso ha descubierto que la mayoría de sus clientes se masturban en el baño, supongo que tanto flirtear los pone cachondos y tienen que desahogarse de algún modo.