Joder tío, me estás destrozando el culo
Era un joven chico cubano totalmente hetero, pero aceptó el reto que aquél tío le había propuesto, o más bien la pasta que le ofrecía. Sin embargo su desvirgación anal fue francamente dolorosa según reconoció posteriormente, puede que por ser la primera vez o tal vez por estar demasiado tenso. Y es que claro, no todos los días un tío hetero recibe una buena tranca en su culo.
La cara del dolor en determinados momentos lo decía todo, lo estaba destrozando, pero sin embargo aquello le encantaba al otro muchacho. Se excitaba sabiendo que con su verga le estaba haciendo daño, y también le ponía cachondo el saber que estaba follando con un tío al que no le iba nada todo eso, ya sabes, el típico que siempre anda coqueteando con tías.
Sin embargo el joven sabía que era lo que tenía que hacer, y no era otra que ser obediente y poner el culo para que se lo follase. Al final acabó bien abierto de piernas mientras le daba fuerte, y cuando vio que el otro iba a correrse hizo lo que habitualmente hacían las chicas con él: acercarse a la polla con la boca bien abierta y la lengua fuera esperando el disparo de semen.