Empezó como un masaje y acabó follándole el culo
Entre amigos a veces parece que vale todo. Se ofreció a darle un masaje, en realidad tenía cierta experiencia y lo cierto es que se le daba bien. Su amigo se echó en una especie de camilla que tenía en la cocina y comenzó a masajear su espalda desnuda. Sin embargo su espalda no era lo único que tenía desnudo, ya que bajo la toalla comprobó que no tenía ropa interior.
No tardó mucho en comenzar a rozarse con su trasero, cosa que por otra parte parecía que el chico deseaba con muchas ganas. Se sacó la polla y después de restregarse un rato acabó penetrando a su amigo y compañero. Le pegó tal follada que lo dejó bastante más relajado que con cualquier masaje, y además también lo dejó bien corrido.