Échamelo todo encima cabrón
En su cara se podía ver lo excitado que estaba, explotaba de placer. Estaba pajeándose en el salón de casa cuando llegó su hermanastro y lo pilló. Siempre le había gustado, pero al ser parte de la familia el tema nunca salió a flote, hasta ese día. Fue el otro el que se lo propuso y finalmente comenzaron a besarse y a desnudarse, se habían puesto muy cachondos solo de pensar lo que iban a hacer. Follaron en el sofá de casa y acabaron corriéndose polla junto a polla. Tras eyacular se volvieron a vestir y se quedaron en el sofá abrazados viendo la televisión como si fueran cualquier otra pareja.