Dos ejecutivos demasiado cachondos
Es muy frecuente que esto suceda entre hombres de negocios, es una forma de relajar la tensión. Ellos se apartaron del resto, buscaban intimidad y algo más. Una vez allí fuera de las miradas ajenas comenzaron a besarse y a quitarse sus trajes, llevaban demasiada ropa, querían ver sus cuerpos desnudos. Lamieron y besaron sus musculosos y fibrosos cuerpos, ambos estaban realmente calientes. Luego se comieron las pollas, y tras probar oralmente sus culos uno de ellos penetró el trasero del otro ejecutivo. Al final cambiaron y dejó que su jefe también se la metiera, ya no paró hasta que se corrió en su ano.