Dentro del hijo de mi hermana
A pesar de ser mi sobrino no nos llevamos muchos años, y reconozco que ese jovencito siempre ha conseguido ponérmela dura. Ese día se lo dije, iba a darle algo que nunca olvidaría, y así fue. Lo agarré y tras sacarme la verga le dije que me la comiera. Me hizo una mamada el cabrón, sabía hacerlo, no era la primera que chupaba. Yo ya estaba duro antes de que se la metiera en la boca, pero me gustó que me la comiera.
Luego se la metí y me lo follé en el sofá de su casa hasta que al final acabé dentro. Pude grabar toda mi leche saliendo de su culito.